La mediación es un proceso que se sustenta en la habilidad del mediador para formular preguntas afectivas. Estas son herramientas críticas que permiten a las partes en conflicto expresar sus intereses y preocupaciones. Las preguntas abiertas fomentan el diálogo y la reflexión, mientras que las preguntas cerradas pueden ayudar a obtener información específica. Al utilizar preguntas exploratorias, los mediadores pueden descubrir intereses ocultos que podrán ser la clave para llegar a un acuerdo. En este contexto, el dominio de las diferentes técnicas de cuestionamiento se vuelve esencial para facilitar el entendimiento y construir un puente entre los conflictos.
La experiencia del autor se resume en este libro, su trascendencia radica en la sencillez y practicidad que toda persona que participa en la solución de conflictos debe conocer.