Los datos curriculares del doctor Magallón Ibarra son interminables, y resultaría una labor ingente entrar al detalle, amén de que son del conocimiento de la comunidad universitaria y en general del foro mexicano e internacional. Simplemente recordemos que es egresado de nuestra Facultad cuando era Escuela Nacional de Jurisprudencia; obtuvo el grado de Doctor en Derecho en la propia Facultad con mención honorífica; no sólo ha sido profesor siempre de Derecho Civil, sino también funcionario universitario; investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, de la que merecidamente es profesor emérito, de manera tal que es una viva personificación de esta, nuestra Universidad. Además, ha sido exitoso abogado postulante.
Pero aunado a todo lo anterior y como dato más importante para su debida consideración y calificación, es que puede ostentar la felicidad personal y profesional de haber sido ejemplo y guía de cinco de sus seis hijos, quienes también han hecho de lo jurídico su actividad profesional. Claro está que en ello se ve también la mano de su queridísima esposa, doña Guillermina Gómez Meléndez de Magallón, quien sabemos ha sido factor fundamental en los alcances profesionales y humanos de nuestro homenajeado y de su familia.